Lord Dunsany (1878–1957)

La Hija del Rey de los Elfos es la historia de los hombres de Erl. Tan sólo humanos, desearon tener un Señor mágico y enviaron al Príncipe Alveric, armado con su mágica espada, a cruzar la linde mítica que separa los "campos que conocemos" del País de los Elfos, allí donde el tiempo y las crueldades del tiempo son desconocidos. Alveric retorna con la hija del rey, la Princesa Lirazel quien le dará un hijo, Orión, destinado a crecer entre dos mundos irreconciliables y a cazar unicornios y a....
Así Lord Dunsany , nos sumerge en ese mundo maravilloso que se extiende más allá de la linde de los campos que conocemos y que conduce en forma directa al niño que yace sepulto en todos nosotros. Excepcional cuentista, La Hija del Rey de los Elfos es sin duda su mejor novela, aquélla que revela las constantes de su obra: la belleza que aflora de una simple mata de hierba; el sutil límite que nos separa del universo mágico y, sobre todo, el juego delicado y casi sensual del lenguaje, que adquiere aquí el papel protagonista central.
Y llegará un momento en el que abandonemos la lectura y, al contemplar el ambiente una vez familiar, advertiremos que ya no estamos en los campos que conocemos, detenidos en un éxtasis eterno, eterno como el País de los Elfos.… (más)

Los dioses de Pegana; El Tiempo y los dioses; La llegada del mar; El secreto de los dioses; En el país del Tiempo; La venganza de los hombres; La noche y la mañana; Los sueños de un profeta; Los hombres de Yarnith; La espada de Welleran; El bandido; En el crepúsculo; Los fantasmas; La ventana maravillosa; El tesoro de los gibelinos; El hombre de los pendientes de oro; La cita; Trece a la mesa; El gambito de los tres marineros; Los tres chistes infernales; El botín de Loma; La torre vigía; El pájaro del ojo difícil; El club de los exiliados; Oriente y Occidente; Los dones de los dioses; Cómo los dioses vengaron a Meould Ki Ning; La plegaria de Boob Aheera.… (más)