Esa jovencita bellísima, pero pobre, que vive en Indochina, no es otra que la propia escritora quien, hoy, recuerda las relaciones apasionadas, de intensos amor y odio, que desgarraron a su familia y, de pronto, grabaron prematuramente en su rostro los implacables surcos de la madurez. Pocas personas -y en particular mujeres- permaneceran inmunes a la contagiosa pasión que emana de este libro.

Un día, ya entrada en años, en el vestíbulo de un edificio público, un hombre se me acercó. Se dio a conocer y me dijo: ...

La tórrida historia de amor prohibido entre una adolescente blanca, de familia venida a menos, y un rico chino, en la Indochina francesa. Se supone que la adolescente es la propia autora. Duras nos cuenta su aventura a base de frases muy cortas y párrafos mínimos, con pocas, duras y exactas palabras. Ni siquiera sabemos el nombre del amante. Lo que sí experimentamos es el calor físico de sus encuentros a centímetros de la calle abarrotada, la sensación pantanosa de ser blancos y franceses pero pobres, y la ambigüedad de los sentimientos de la protagonista. ( )

Narración autobiográfica de la historia de amor ambientada en Indochina de una adolescente de quince años y un rico comerciante chino de veintiséis. ( )