John E. MullerReseñas

El hombre ya ha entrado en el espacio y ha vivido para contarlo. La ciencia-ficción está a punto de ser superada por los hechos. El mañana ya está aquí. La era espacial ya no es el sueño del escritor ni la esperanza del científico. Ya ha amanecido.
El hombre galopa hacia las estrellas. Los cascos rugientes de los cohetes marcan el camino hacia el Infinito. No hay vuelta atrás. La era espacial ya no es el sueño del escritor ni la esperanza del científico. Ya ha amanecido.
El hombre galopa hacia las estrellas. Los cascos rugientes de los cohetes marcan el camino hacia el Infinito. No habrá vuelta atrás. Las posibilidades ilimitadas se extienden ante nosotros. Un sinfín de oportunidades nos atraen. ¿Las aprovecharemos para bien o para mal?
El espacio encierra un millón de incógnitas. Somos como niños que se zambullen en un vasto océano y se lanzan con valentía hacia una orilla invisible, la orilla de la tierra inexplorada. Mientras nadamos hacia el futuro, nos contamos historias sobre las maravillas que nos esperan.

Venusinos, amazonas, centaurinos superinteligentes, todos complotados para dominar la tierra.
Por suerte, los esteroidizados heroes los matan a todos...
Un plomo...

SF sesentosa... de cuando se pensaba que con dos alambres, un poco de atomica y unas válvulas se podía viajar en el tiempo y el espacio.

Un quimico descubre una forma de comunicarse con otras razas del espacio mezclando liquidos.... en fin.. y despues (obvio) impide una invasión alienigena!!!