Pep Brocal

Pep Brocal en su última novela gráfica entra en un terreno narrativo biográfico alucinante que no da respiro al lector por los giros, revueltas, entradas, salidas, subidas y bajadas –tanto materiales como de nivel narrativo—de su centenar de páginas de amplio formato y colorida imagen. Alter y Walter lleva el subtítulo de La verdad invisible. La parte principal se refiere al desdoblamiento de un personaje perdido en una especie de sueño premonitorio circular. La parte explicativa deja de lado el aspecto psicológico para aludir al filosófico. El desarrollo de ambas partes sigue un trayecto en espiral doble que Pep Brocal conduce con evidente maestría.

Porque, ¿quién es Walter? ¿Quiénes son y qué representan los extraños personajes que le rodean? ¿Qué decir de sus padres, de su hermano, de su mujer? ¿Cuál es su aventura? Esto para no hablar de extraños seres artificiales o antropomórficos que entran y salen de escena impasibles (alguno es de madera), frenéticos, y se convierten en amenazantes reptiles o pajarracos. Añádase un gigante y adoquines que cobran vida. Y me quedo corto porque hasta Steve McQueen tiene un papel en la historia. Descifrar el juego de espejos, reflejos, dobleces y situaciones insólitas forma parte del interés de esta novela gráfica.

El guión imaginado por Brocal está en plena consonancia con la imagen, o quizá sea al revés. El caso es que se trata de un trabajo de primer orden en todos sus aspectos. Inquietante, risible, audaz, entretenido, profundo y muy representativo del elevado nivel que alcanza en España en estos momentos la plataforma de la pictoliteratura.… (más)