Yeyo Balbás

Año 23 a.C. Augusto está gravemente enfermo y sus dos herederos se disputan la sucesión. Para ganarse el favor de la plebe, Marco Claudio Marcelo dilapidará su fortuna en juegos circenses, obras de teatro y combates entre gladiadores, mientras una atroz sequía hace peligrar el suministro de trigo a Roma. A esta amenaza se suma la conspiración de un grupo de senadores, liderados por Fanio Cepión y Licinio Varrón Murena, que pretenden reinstaurar la República.
Como agente al servicio de Tiberio, Marco Vitruvio Rufiano deberá infiltrarse en la escuela de gladiadores de Varrón Murena para averiguar sus planes y tratar de desbaratarlos. Una misión que le llevará desde los bajos fondos de la capital hasta la arena de los anfiteatros, en los que se decide el futuro de la República. Pronto descubrirá que su hermanastra Vitruvia, que regenta un negocio editorial, y Cintia, una actriz de mimo, desempeñan un importante papel en la despiadada lucha por el control de la opinión pública.… (más)

Antes de nada, he de decir que me acercaba a este libro con cierta prevención; he coincidido mucho con el autor en foros de historia y recreación histórica, donde ha mostrado un conocimiento enorme, una facilidad de trato, espíritu didáctico, reflexivo y sensato, elementos que hacen un delicia leer sus entradas y debatir con él (siempre desde un menor conocimiento, he de decirlo). Igualmente, he visto alguno de sus cortos, uno de ellos que amablemente me hizo llegar por correo, gesto que sigue guardado en mi memoria.

Así pues, la prevención es la que tienes cuando un amigo te pide que juzgues su obra. Esa era la sensación al abordar Pax Romana: quería que me gustara y temía que no lo hiciera.
Afortunadamente, me ha parecido una estupenda novela histórica.

Ambientada en las guerras cántabras, la novela se centra en la vida cotidiana de los legionarios, descrita maravillosamente, de modo que uno no sólo se lo imagina a la perfección sino que lo siente, huele y saborea, aunque sean unas raciones infectas fruto de los tejemanejes de los publicanos. De ellos, sobresale un agrimensor, Marco Vitrubio Rufiano, protagonista de la novela junto con sus contubernios. A través de sus ojos veremos cómo se desarrollan las guerras cántabras, la corrupción que inunda Roma, los ideales que se van desvaneciendo y algunas cosas más sobre el arte, la guerra, el amor, el deber y la lealtad.
La novela está bien escrita, tiene pulso y traza unos personajes bien delineados y con los que puedes encariñarte a pesar de que Marco sea demasiado completo (hijo adoptivo del famoso Vitrubio, lo que permite a Yeyo reflexionar sobre aspectos un tanto ajenos al corazón de la novela, como el arte).

Posiblemente, al lector avezado la enésima descripción de la composición de las legiones o de la castrametación, por citar algunas, pueda suponerle cierta fatiga por conocidas y al lector neófito sobrepasarle, especialmente la enumeración de los tipos de campamentos, pero pasajes como la persecución y el acierto (enorme) de descender a la pequeña escala –al final, la no se trata de grandes batallas sino de encuentros entre unas pocas decenas de hombres- logran momentos de gran intensidad narrativa.

A ello hay que sumar una “historia de amor” bien llevada. Sí, la tiene, pero tratada con madurez y lejos de cualquier idealización o tendencia al empalago.

Todo ello para una novela primeriza, realizada con un ímprobo esfuerzo de documentación, de concisión y cariño.

Posiblemente, no haya sido todo lo imparcial que debiera pero me ha parecido una notable novela de aventuras con una logradísima ambientación histórica.… (más)

Año 25 a.C. Tras derrotar a Marco Antonio y Cleopatra, Octavio ha sido nombrado por el senado primer ciudadano de Roma y Augusto. Ahora dirige una guerra encaminada a conquistar a los cántabros y astures, los últimos pueblos no sometidos de Hispania, requisito indispensable para instaurar la ansiada Paz Romana. Sin embargo, la tenaz resistencia autóctona le obligará a solicitar refuerzos desde el sur de la Galia para tomar a su enemigo por la espalda.

Desembarcada en tierra hostil, la Novena Legión pronto se ganará el sobrenombre de Hispana tras una dura campaña contra las tribus cántabras. Marco Vitruvio Rufiano, ingeniero militar, y sus compañeros de contubernio deberán atravesar el territorio enemigo enfrentándose un líder insurgente llamado Corocuta, por el que Augusto ha ofrecido una enorme recompensa. Este hecho, junto a las fricciones internas, los abocará a una despiadada conjura en torno a la guerra.… (más)