QUETZALCOATL: SERPIENTE EMPLUMADA

El símbolo, el mito y el culto de Querzalcéatl tienen un origen múltiple:
el agua y la tierra se unieron en un principio en la imagen de la fertilidad
resumida en la serpiente-jaguar; más tarde se agregó a ésta un elemento
celeste la lluvia, el agua que viene de las alturas y nació el pájaro-serpiente;
los pueblos teocráticos, finalmente, elevaron estas concepciones al ámbito
de las deidades y terminaron representando a la nube de la lluvia, portadora,
propiciadora de la fertilidad, como una serpiente emplumada o Quetzalcoatl.

Con el tiempo, el pájaro-serpiente se antropormorfizó: así surgió el dios
Quetzalcóatl, hombre, pájaro y serpiente, simbolizado en el planeta Venus,
estrella matutina y vespertina.

Deidad dual, tuvo un impresionante culto a lo largo y ancho de Mesoamérica
y recibió diversos nombres. Los gobernantes-sacerdotes del mundo
mesoamericano que llevaron su nombre llegaron a ser confundidos con el
dios y-ya sea por sus obras benéficas o por sus hechos hazañosos-elevados
al rango de héroes deificados.

A la llegada de los españoles. el culto de Quetzalcóatl conservaba vigencia y
aún se representaba al dios en esculturas y códices.

Los astrónomos modernos aseguran que la marcha de Quetzalcóatl hacia el Este marca seguramente la ruta de un considerable acontecimiento cósmico recogido por los antiguos astrónomos americanos. ( )