En Nadie es ilegal, Mike Davis y Justin Akers Chacón exponer el racismo de los vigilantes anti-inmigrantes y poner un rostro humano a los inmigrantes que a diario arriesgan sus vidas para cruzar la frontera para trabajar en los Estados Unidos. La lucha contra el coro creciente de voces anti-inmigrantes, Nadie es ilegal echa por tierra las ideas principales detrás de la reacción violenta del ala derecha menudo violenta contra los inmigrantes, dejando al descubierto sus profundas raíces en la historia de EE.UU., y documenta el nuevo movimiento de derechos civiles que ha organizado protestas en todo el país para exigir justicia y dignidad para los inmigrantes. In Nadie es ilegal, Mike Davis and Justin Akers Chacon expose the racism of anti-immigration vigilantes and put a human face on the immigrants who daily risk their lives to cross the border to work in the United States. Countering the mounting chorus of anti-immigrant voices, Nadie es ilegal debunks the leading ideas behind the often-violent right wing backlash against immigrants, revealing their deep roots in US history, and documents the new civil rights movement that has mounted protests around the country to demand justice and dignity for immigrants.