Convertido en emperador de Brasil a los veintitrés años, Pedro I marcó con su huella la historia de dos continentes. Desmedido y contradictorio, las mujeres fueron su salvación y su perdición: mientras su esposa, la virtuosa Leopoldina de Austria, lo llevó a la cumbre, su amante, la ardiente Domitila de Castro, lo arrastró a la decadencia. Cuando el inmenso Brasil se le hizo pequeño y el poder dejó de interesarle, puso su vida en juego por aquello que creía justo. Y alcanzó la gloria.

22 de abril de 1500. El almirante portugués Pedro Alvares Cabral llegó a la costa americana por casualidad....

La introduccion del libro dice:
Premio Planeta 2011
Convertido en emperador de Brasil a los veintitrés años, Pedro I marcó con su huella la historia de dos continentes. Desmedido y contradictorio, las mujeres fueron su salvación y su perdición: mientras su esposa, la virtuosa Leopoldina de Austria, lo llevó a la cumbre, su amante, la ardiente Domitila de Castro, lo arrastró a la decadencia. Cuando el inmenso Brasil se le hizo pequeño y el poder dejó de interesarle, puso su vida en juego por aquello que creía justo. Y alcanzó la gloria.
Con la belleza exuberante del trópico como telón de fondo, Javier Moro narra con pasión por el detalle la prodigiosa epopeya del nacimiento del mayor país de Sudamérica. ( )

La historia de Brasil, la historia de cuando los reyes de Portugal tuvieron que salir exiliados a Brasil. Buenísimo. ( )

Proclamado emperador de Brasil con veintitrés años, Pedro I dejó su impronta en la historia de dos continentes. Desmesurado y discordante, las mujeres fueron su salvación y su condenación: mientras su esposa, la íntegra Leopoldina de Austria, lo aupó hasta la cima, su amante, la fogosa Domitila de Castro, le llevó a la decadencia. Cuando el descomunal Brasil se le quedó pequeño y el poder dejó de motivarle, se jugó la vida por aquello que creía justo. Y obtuvo la gloria.