La Fenomenología del Espíritu tiene la finalidad de sustituir a las explicaciones psicológicas y abstractas acerca de la fundamentación del saber. ( )

Librería 6. Estante 6.

Voy a empezar con lo que creo haber entendido. Lo que hay es lo que puedo pensar. En cada cosa que puedo pensar pueden distinguirse dos momentos. Por un lado, el "ser-en-sí", lo que ello es propiamente. Por otro lado, su existencia real, efectiva, que Hegel llama "ser-para-sí". Ambos momentos son inseparables: sin en "ser-en sí" no hay nada, pero sin el "ser-para-sí" tampoco. Entre ambos momentos se produce un movimiento de ida y vuelta permanente, y todo ello (los dos momentos y el movimiento) está animado y coordinado por el "espíritu". El conjunto de todo forma la esencia de la cosa pensada. Esto puede aplicarse a objetos o pensamientos individuales, pero también colectivos, y entre estos últimos parece que a Hegel le interesan sobre todo el Estado, la religión y el arte.

Vaya por delante que me parece que esta concepción dinámica de las cosas es una gran aportación. Pero también tengo que decir que no he entendido una mierda de la mayor parte de las páginas de este libro. Lo que va escrito arriba es lo que creo que he sacado en claro, y sin estar muy seguro del todo. Incluso el introductor y el traductor de esta edición insinuan en alguna ocasión que ellos mismos tampoco acaban de entender bien a Hegel, que parece escribir para él mismo y para quien le pueda seguir. Por eso, he tardado mucho más de lo habitual en leer este libro, y lo he tenido que entreverar con otras lecturas más asequibles. Será una cumbre del pensamiento, pero debe estar solo en su cumbre. ( )

FENOMENOLOGÍA DEL ESPIRITU

STE libro expone el saber en su devenir, en el devenir del saber
La Fenomenología del espiritu tiene la finalidad de sustituir a las
explicaciones psicológicas, y también a las discusiones abstr
acerca de la fundamentación del saber. La Fenomenología del espíritu
considera los preliminares para la ciencia desde un punto de
vista tal, que se convierte ella misma en una primera ciencia filosófica,
nueva e interesante. La Fenomenologia comprende y conci-
be las diversas figuras del espíritu como otras tantas estaciones en
el camino por el que el espiritu se convierte epíritu absoluto.
Por tanto, en las diversas secciones de esta ciencia
que a su vez se dividen en varias subsecciones, se tratan la
conciencia, la autoconciencia, la razón observadora y la razón práctica,
el espíritu mismo en cuanto ético, en cuanto ilustrado y en cuanto
moral, y, finalmente, en cuanto religioso, en las distintas forma
de este espíritu religioso. La riqueza de las manifestaciones del es
píritu, que a una mirada inicial se le antojan un caos, son puestas
en un orden científico que las va presentando conforme a su pro
pia necesidad, un orden en el que las figuras imperfectas se disuel
ven y pasan a convertirse en otras superiores que constituyen la
verdad de las primeras. Su verdad última la encuentran esas figuras
primero en la religión, y después en la ciencia, como resultado
del Todo. En el Prefacio el autor se explica acerca de lo que, a su
juicio, la filosofía necesita en su situación actual; y se manifiesta
también acerca de la arrogancia y de los excesos de ciertas formu-
las filosóficas que en tan mal lugar dejan a la filosofia y acerca de
aquello de lo que debe tratarse tanto en la filosofia como en el es
tudio de la filosofía."

Así era presentada la Fenomenología del espíritu el 28 de junio
de 1807 en la Gaceta de Bamberger, periódico que Hegel dirigía