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Cargando... We Need to Talk About Kevin: A Novel (P.S.) (2003 original; edición 2006)por Lionel Shriver
Información de la obraTenemos que hablar de Kevin por Lionel Shriver (Author) (2003)
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Eva es autora y editora de guías de viaje para gente tan urbana y feliz como ella. Casada desde hace años con Franklin, un fotógrafo de publicidad, decide, con muchas dudas, cerca de los cuarenta años, tener un hijo. Y el producto de tan indecisa decisión será Kevin. Pero casi desde el comienzo, nada se parece a los mitos familiares de la clase urbana y feliz. Eva siente que Franklin se ha apoderado de su maternidad, convirtiéndola en el mero contenedor del hijo por nacer. Y Kevin es el típico bebé difícil, que tortura con sus llantos, que no quiere comer. Se convertirá en el terror de las niñeras, en un adolescente terrible, en el antihéroe a quien sólo le interesa la belleza de la maldad. Al llegar la sangrienta, mortífera epifanía de Kevin, dos días antes de cumplir los dieciséis años, el niño es un enigma para su madre. ionel Shriver hace figurar esta cita como prólogo a la historia que nos va a contar, un largo monólogo a través de unas imaginarias cartas que la protagonista Eva Khatchadourian escribe a su marido Franklin Plaskett. Y lo hace para descargar los sentimientos, emociones, tristezas y desesperanzas que ha soportado desde el momento en que decidieron tener un hijo. Incluso antes de ese momento porque también expone las razones que le llevaron a admitir esa posibilidad. Ella era una mujer realizada, con una profesión que le satisfacía plenamente, recorrer el mundo buscando material para editar guías de viaje para otra gente tan feliz y urbana como ella. Casada con Franklin, un fotógrafo e iluminador que trabaja en publicidad. Son felices y se complementan pero él siente que falta algo en su matrimonio, un hijo que complete la bonanza en que se desenvuelve su unión. Eva es reticente, pero accede al deseo de su esposo en un momento en que se da cuenta de la mortalidad del mismo, de que pasaría si él faltase. No quiere quedarse sola y piensa que ese hijo que él tanto desea puede ser el compañero que necesite, si se da el caso. La verdad es que los dos llevan una vida agitada, ella viajando constantemente en busca de datos para su libros y él viajando también buscando exteriores en los que filmar, o simplemente fotografiar, anuncios publicitarios. El embarazo que Eva vive no es precisamente el momento más feliz de su existencia. Lo siente como algo extraño a ella, es más, es un freno a su forma de actuar y una permanente base de conflictos con su marido que le reprocha su poca preocupación por el estado en que se encuentra. Incluso el nombre o el apellido que llevará el nacido son motivos de controversia y discusión. Lo que antecede preludia una relación madre-hijo complicada. Eva no se siente especialmente alborozada por el nacimiento del pequeño Kevin, un parto difícil, cuyo resultado no le proporciona ese estado emocional de maternidad feliz. Vemos que esa incompatibilidad parece tenerla también el pequeño, llora constantemente, rechaza el pecho de su madre, no quiere comer, en definitiva, desde su nacimiento es un niño complicado. Según va creciendo y recibiendo los estímulos de parte de las personas que lo tratan va tomando posiciones ante el mundo que lo rodea con una sola excepción, su padre. Este que pasa mucho tiempo fuera de casa por motivos laborales, cuando vuele lo trata como un colega, su compañero de juegos, su aliado, el clavo al que agarrarse ya que todo lo que hace mal él lo disculpa; sin darse cuenta que es un niño manipulador y que lo utiliza como una forma de castigo a su madre. Franklin la culpabiliza del estado del pequeño y le echa en cara que no es una buena madre. Leyendo el libro y pensando en la educación de Kevin, en el enfrentamiento que por él tienen sus progenitores, me vienen a la cabeza aquella pregunta de Mafalda a sus padres, con su hermano al lado: “Ustedes tienen un plan para educarnos o van improvisando“. Por que de eso trata también la historia, de como los padres deben enfocar la educación de sus hijos, de como marcar los límites y que estos estén consensuados y ambos sean firmes en su defensa. Un niño como Kevin necesita esto como el aire que respira. Otras preguntas suscita su lectura. ¿La deriva de un niño hacia el mal es producto solo de una educación equivocada?. ¿Se nace con esa propensión o se adquiere?. ¿Como influye la falta de amor de uno de los progenitores, en este caso su madre, en su comportamiento futuro?. No hay duda que todos estas circunstancia son influyente en el futuro carácter de un infante, como lo son los múltiples ejemplos de violencia que reciben diariamente y que en ocasiones se ensalzan por los medios sociales. Todo esto plantea el libro y más. También nos expone las consecuencias de lo que Kevin ha hecho, desde el dolor causado hasta la responsabilidad que Eva, como madre, asume. Como su vida, antes feliz y plena, se rompe y debe comenzar de nuevo, pero ya no como antes. La losa de esa responsabilidad será la carga que la limitará hacia el futuro. Los personajes están muy bien descritos, la maldad de Kevin, el miedo a la soledad de Eva, la forma de ser de Franklin. Todo da como resultado un libro duro, sobrecogedor y que en algún momento puede hacerse difícil de leer, pero la buena prosa, la manera de expresar lo que sucedió y sucede y las ansias de llegar a una conclusión, hace que su lectura atraiga y emocione. Es normal comparar la historia con la tragedia de Columbine y sin duda este hecho fue importante para que el libro saliera a la luz. Lionel Shriver (nacida Margaret Ann Shriver el 18 de mayo de 1957) es periodista y escritora.Nació en Gastonia (Carlolina del Norte), en el seno de una familia profundamente religiosa , siendo su padre un predicador presbiteriano. Cambió su nombre a la edad de 15 años porque le gustaba como sonaba. Se graduó por la Universidad de Columbia en Bellas Artes, y también obtuvo un máster. Ha vivido en Nairobi, Bangkok y Belfast, y en la actualidad reside en Londres. Esta casada con el batería de jazz Jeff Williams. Publicó su primera novela, The Female of the Specie, en 1986. Desde entonces ha escrito diez más, de las que se han traducido al español Tenemos que hablar de Kevin, 2005; El mundo después del cumpleaños, 2007; Todo esto para qué, 2010 y Big Brother, 213. En 2005 ganó el Premio Orange de ficción por la novela que tenemos entre manos y que era la séptima que publicaba. El libro creó mucha controversia, y consiguió su éxito a través del boca a boca. La novela ha sido llevada a la gran pantalla en 2011, dirigiendo la película Lynne Ramsay. En julio del 2005 Shriver empezó a escribir artículos para el diario inglés The Guardian, en los que comparte sus opiniones respecto a la forma de ver la maternidad en las culturas y sociedades occidentales, la estrechez de miras de las autoridades del gobierno británico y la importancia de las bibliotecas (planea dejar en herencia su librería al Belsfast Library Board de cuyas bibliotecas sacó tanto provecho cuando vivió en Irlanda del Norte). Con esta novela el Club de Forum mañás da comienzo al curos 2015-2016. Esperamos que sea tan interesante como han sido todos los pasados. “Eva es autora y editora de guías de viaje para gente tan urbana y feliz como ella. Casada desde hace años con Franklin, un fotógrafo de publicidad, decide, con muchas dudas, cerca de los cuarenta años, tener un hijo. Y el producto de tan indecisa decisión será Kevin. Pero casi desde el comienzo, nada se parece a los mitos familiares de la clase media urbana y feliz. Eva siente que Franklin se ha apoderado de su maternidad, convirtiéndola en el mero contenedor del hijo por nacer. Y Kevin es el típico bebé difícil, que tortura con sus llantos, que no quiere comer. Se convertirá en el terror de las niñeras, en un adolescente terrible, en el antihéroe a quien sólo le interesa la belleza de la maldad. Al llegar la sangrienta, mortífera epifanía de Kevin, dos días antes de cumplir los dieciséis años, el niño es un enigma para su madre.”
A powerful, gripping and original meditation on evil At a time when fiction by women has once again been criticised for its dull domesticity, here is a fierce challenge of a novel by a woman that forces the reader to confront assumptions about love and parenting, about how and why we apportion blame, about crime and punishment, forgiveness and redemption and, perhaps most significantly, about how we can manage when the answer to the question why? is either too complex for human comprehension, or simply non-existent. The epistolary method Shriver uses, letters to Eva's absent husband, strains belief, yet ultimately that's not what trips us up. It's Eva's relentless negativity that becomes boring and repetitive in the first half of the book, the endless recounting of her loss of svelteness, her loss of freedom. Maybe there are books to be written about teenage killers and about motherhood, but this discordant and misguided novel isn't one of them. A little less, however, might have done a lot more for this book. A guilt-stricken Eva Khatchadourian digs into her own history, her son's and the nation's in her search for the responsible party, and her fierceness and honesty sustain the narrative; this is an impressive novel, once you get to the end. Tiene la adaptaciónPremiosDistincionesListas de sobresalientes
Tenemos que hablar de Kevin es una novela epistolar. Cartas largas y detalladas de una mujer a su exesposo, Franklin, el padre de su hijo. Cartas llenas de una ironi?a cruel y desganada. Poco queda de Eva, la mujer que las firma, salvo las palabras. Lo que quiere contarle a Franklin es la cata?strofe de su maternidad. El hijo, Kevin, esta? preso. Es un adolescente y es un asesino. Y ella necesita nombrar a ese joven al que no supo amar y preguntarse por el origen del Mal. No hay nadie querible en esta novela de Lionel Shriver. Eva es una empresaria exitosa, creadora de gui?as de turismo hi?pster; Franklin es un publicista. Kevin irrumpe como una maldicio?n en su vida perfecta. Es temible desde que nace. Nada le importa. No es posible castigarlo ni amenazarlo porque odia vivir y todo le aburre, salvo la crueldad. Kevin culpa a sus padres de haberlo trai?do a este mundo estu?pido y se venga, no solo como autor de una masacre, sino como nin?o imposible, que ataca a los de?biles, que usa pan?ales hasta los seis an?os, que aprende a leer y a sumar en secreto, como si un demonio le susurrara el conocimiento desde el abismo. Tenemos que hablar de Kevin es una novela sobre la maternidad y sobre co?mo los hijos pueden constituir el misterio ma?s i?ntimo y ma?s insondable.-- No se han encontrado descripciones de biblioteca. |
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Google Books — Cargando... GénerosSistema Decimal Melvil (DDC)813.54Literature English (North America) American fiction 20th Century 1945-1999Clasificación de la Biblioteca del CongresoValoraciónPromedio:
¿Eres tú?Conviértete en un Autor de LibraryThing. Penguin Australia2 ediciones de este libro fueron publicadas por Penguin Australia. Ediciones: 1921145080, 192175849X |