En el campo de concentración de Changi, en Singapur, a finales de la SGM, se hacinan oficiales británicos, australianos, neozelandeses, norteamericanos y algunos canadienses, bajo la estricta supervisión de los japoneses. El mayor problema de los prisioneros, consiste en la falta de alimentos y medicinas; sólo los más fuertes, logran sobrevivir, y entre ellos, se halla Rey, un cabo norteamericano, hábil para toda clase de canjes. Entre los diversos "negocios" del norteamericano, figura la cría de ratas... James Clavell logra captar el lado humano de cualquier guerra - en este caso la de la SGM - a través de personajes, bien descritos, muy humanos y complejos.

La historia del Rey Rata tiene que ver con un grupo de americanos y soldados británicos que eran prisioneros de guerra en un campamento japonés durante la Segunda Guerra Mundial. A través del astutas negociaciones y organización, uno de los prisioneros americanos, el Rey Corporal logra amasar una riqueza de géneros materiales desesperadamente deseados por los otros prisioneros de guerra.Como resultado, él se sienta en la cima de la jerarquía de prisioneros y puede, a menudo, comprar la lealtad con un cigarro o un huevo fresco. Los otros prisioneros simplemente lo llaman el Rey, porque eso es lo es él dentro de la prisión. Cuando él se embarca en una ventura para engendrar ratas como comida, él se gana el título “Rey Rata”, lo cual, de algún modo, parece encajarle.