Ética nicomáquea

Filosofía

Como pasa con muchas obras de Aristóteles, cuando uno las va leyendo se va encontrando con conceptos tan populares que ya se han convertido en máximas que todos repetimos. "En el medio está la virtud" o "el fin de la vida es la felicidad" nos lo repetían nuestros padres y abuelos a modo de refranes para que se fijasen en nuestra mente como lo están en la suya. Pero no son refranes, al menos no en el sentido de "sabiduría popular", sino que son parte del pensamiento moral del genial filósofo de Estagira, tal como se expone en esta obra.

Solo por eso este libro ya justifica su fama. Sin embargo, al leerla, junto con destellos de genialidad me he encontrado bostezando en muchas páginas. Y es que Aristóteles, depués de sentar los principios generales, detalla su aplicación más o menos concreta, diseccionando las diferentes virtudes y valores usuales en su tiempo, y esto en ocasiones resulta pesado. No es tan abstruso como la "Metafísica", desde luego, pero las largas enumeraciones acaban siendo un rollo. Menos mal, como digo, que junto a estas hay fogonazos de sabiduría que, dos milenios y medio después, forman parte de nuestra cultura. ( )