Georges Rodenbach (1855–1898)
Autor de Brujas la muerta
Sobre El Autor
Créditos de la imagen: Georges Rodenbach. Frontispiece from Georges Rodenbach (1920) by Georges Ramaekers
Obras de Georges Rodenbach
En Exil 1 copia
L'hiver mondain 1 copia
Ölü Brugge 1 copia
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Conocimiento común
- Nombre legal
- Rodenbach, Georges-Raymond-Constantin
- Fecha de nacimiento
- 1855-07-16
- Fecha de fallecimiento
- 1898-12-25
- Lugar de sepultura
- Cimetière du Père-Lachaise, Paris, France
- Género
- male
- Nacionalidad
- Belgium
- Lugar de nacimiento
- Tournai, Belgium
- Lugar de fallecimiento
- Paris, France
- Ocupaciones
- poet
novelist
lawyer - Relaciones
- Rodenbach, Albrecht (cousin)
- Biografía breve
- Georges Rodenbach (1855-1898) born in Tournai, spent most of his time in Ghent and later Paris where like his childhood friend and Flemish compatriot Emile Verhaeren, he rubbed shoulders with all the main players of the symbolist fin de siecle. But Rodenbach is forever associated with Bruges, the location for his most celebrated and enduring work. He also wrote a number of collections of poetry of which ‘Le Règne du silence’ from 1891 in many ways prefigures Bruges-La-Morte. A further novel ‘Le Carilloneur’ 1897 is also set in Bruges. Several books of short stories, prose poems, and a range of essays on figures such as Rodin, Monet, Huysmans, Verlaine and Mallarmé attest to a prodigious talent. Rodenbach was a typical artist of the decadent period, unfailingly anti-bourgeois, solitary, an aesthete suffering some undisclosed malady of the spirit, a palpable ennui or spleen. But Rodenbach was very much a modern poet too and his precise, delicate, yet existentially muscular poems are still of much relevance today.
source: dedalusbooks.com
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La defino como gótica porque, a pesar de que fue escrita a finales del XIX, al final de la cuesta del simbolismo, conserva temáticamente todos los rasgos de la decadencia y el misterio de lo gótico. Es, por así decirlo, una novela gótica contemporánea. ¿Qué tiene de gótica? La ciudad, anclada en sus espacios medievales y oscuros. ¿Qué tiene de contemporánea? Todo lo demás. Bajo el espíritu místico y torturado de Hugues Viane, el protagonista, se esconde mucho de velado erotismo necrófago, de pesadilla absoluta, cuya vida se sustenta a base de, como se dice en la novela, "gozos fúnebres y violentos". Formalmente, sin embargo, bebe de las mismas fuentes que Joris-Karl Huysmans o Paul Valéry.
"Brujas la muerta" tiene el ingrediente urbano que la hace incomparable. Me parece extraordinario el hecho de que la acción vaya inseparablemente unida a una geografía, a una ciudad como Brujas, gris, triste, muy alejada de la luminosidad de la ciudad actual. Una oscuridad que todavía se conservaba a caballo entre los siglos XIX y XX y que fascinó a un buen puñado de artistas.
Brujas es protagonista absoluta, planteada como una simbiosis perfecta entre la tristeza de sus calles y la del Hugues Viane, siempre de luto, bordeando los canales de aguas lentas y oscuras. La ciudad lo empuja, lo define, lo modela hacia la melancolía; condena su pecado, su blasfemia; enmarca el paso fantasmal de la muerte.
Exactamente, y así enlazo con sus influencias sobre otras obras y otros autores, es el mismo protagonismo que tiene San Francisco en Vértigo (1958), la película de Alfred Hitchcock, quien concretamente se basó en "De entre los muertos", la novela policiaca de Boileau-Narcejac (1954), que no era otra cosa que la adaptación más o menos acertada de la de Rodenbach. Vértigo y Brujas la muerta no comparten trama, pero sí espíritu y un par de escenas, muy visuales en la novela, muy literarias en la película, que son calcadas. Y hablando de cine, no he podido evitar el recordar, mientras leía, la película de François Truffaut "La habitación verde" (1978), donde Gérard Mazet, el protagonista, rinde culto a su mujer tan obsesivamente, con tanta parafernalia y ritualidad, como lo hace Hugues Viane con la suya. Aunque en este caso sea la adaptación de una novela de Henry James.
Como dije, es una novela que fascina a los artistas, empezando por Korngold Erich Wolfgang, que la utilizó para el libreto de su ópera "La ciudad muerta" ("Die tote Stadt": German Libretto, 1920), y terminando con Hitchcock. Sobre la ópera, tuve la suerte de verla representada en el Liceu hace tres o cuatro años, y desde entonces no puedo quitármela de la cabeza. En el programa de mano se comentaba que La ciudad muerta fue, a su vez, la que inspiró a Fritz Lang para su película Las tres luces (1921), que para muchos es realmente su primera obra; esta así mismo fue la que inspiró a Buñuel para dedicarse al cine, etc., etc., etc., y así una red infinita de influencias.… (más)