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Athanasius Kircher (1602–1680)

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Sobre El Autor

Incluye el nombre: Atanasius Kircher

Créditos de la imagen: Photo © ÖNB/Wien

Obras de Athanasius Kircher

China illustrata (1979) 12 copias
Musurgia universalis (2006) 6 copias
Le théâtre du monde (2009) 3 copias

Obras relacionadas

The Penguin Book of Dragons (2021) — Contribuidor — 112 copias
La Tarantella: Antidotum Tarantulae (2002) — Contribuidor — 4 copias

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Conocimiento común

Nombre canónico
Kircher, Athanasius
Fecha de nacimiento
1602-05-02
Fecha de fallecimiento
1680-11-27
Género
male
Nacionalidad
Holy Roman Empire
País (para mapa)
Germany
Lugar de nacimiento
Geisa, Fulda, Holy Roman Empire
Lugar de fallecimiento
Rome, Papal States
Lugares de residencia
Heiligenstadt, Germany
Würzburg, Germany
Koblenz, Germany
Rome, Papal States
Avignon, France
Educación
Jesuit College, Fulda
Ocupaciones
priest
scholar
scientist
polymath
Organizaciones
Society of Jesus (1618, ordained 1628)
University of Würzburg
University of Avignon
Collegio Romano
Biografía breve
During his lifetime, the Jesuit polymath Athanasius Kircher (1602-1680) was widely regarded as the physical embodiment of all the learning of his age. A refugee from war-torn Germany, Kircher arrived in Rome just after Galileo's condemnation, where he was heralded as possessing the secret of deciphering hieroglyphics. He wrote over thirty separate works dealing with subjects ranging from optics to music, from Egyptology to magnetism. He invented a universal language scheme, attacked the possibility of alchemical transmutation and devised a host of remarkable pneumatic, hydraulic, catoptric and magnetic machines, which he displayed to visitors to his famous museum, housed in the Jesuit Collegio Romano. His books, lavishly illustrated volumes destined for Baroque princes with a love of the curious and exotic, are permeated with a strong element of the Hermetic philosophy of the Renaissance, synthesized with the Christianized Aristotelianism of the Jesuit order to which Kircher belonged.

Miembros

Reseñas

EL ARCA DE NOE es una obra que
trata de las cuestiones fronterizas.

El Concilio de Trento había colocado a los
exegetas en una situación muy delicada,
pues la inspiración biblica debía entenderse
en un sentido literal, lo que realmente se
iba haciendo más difícil de admitir a medida
que las ciencias ofrecían nuevos
descubrimientos.

Uno de los puntos cruciales entre la Biblia y
la razón se situaba en el Arca de Noé.

Para casar la razón con la fe, Kircher
desarrolla toda su amplitud de conocimientos y demuestra
que el mito del diluvio fue un hecho real, y ningún
argumento razonable puede esgrimirse en
contra.

La obra está dedicada al rey Carlos II de España,
en cuyos dominios no se pone el sol.
… (más)
 
Denunciada
FundacionRosacruz | Sep 23, 2019 |
ARITMOLOGÍA:HISTORIA REAL Y ESOTÉRICA DE LOS NÚMEROS

La aritmología es un libro estructurado en cuatro partes, donde hace constar una relación del origen y la evolución de los números entre los pueblos que los conocieron, hasta los que hoy siguen usándolos. En la obra, Kircher establece también que el desarrollo numérico se podía vincular de forma clara con la evolución de los estudios de la Astronomía y la Cábala judía

En Aritmología, publicada en 1665 en Roma, y editada en castellano por Atilano Martínez Tomé se desvela en gran parte el pensamiento central de nuestro jesuita, siempre inacabado.

En este manual de Cábala Pitagórica en la línea de Reuchlin y Agrippa, agrega nuevos desarrollos matemáticos en la mejor tradición de la Cábala y Alquimia Judía (de la cual ya nos da cuenta Zósimo, alquimista y mago greco judío en el siglo IIIIV), respecto a talismanes y amuletos y en particular a la perfección paradójica de los cuadrados mágicos, atribuidos los primeros a los siete planetas y que, como se sabe, tienen la particularidad de producir por medios lógicos y arbitrarios, –propios del sistema decimal y su representación geométrica– el más completo asombro y la idea de que nuestra comprensión está limitada sólo a tres dimensiones, un mundo chato y casi plano, al que le faltan aún se concedan acaso otros que les dieran una perspectiva nueva, multidimensional, dodecaédrica, más bien tenue y transparente, un imaginal con iluminación ambiental, siempre infusa.

La mayor parte de estos asombros son numéricos y en combinaciones indefinidas en cadenas de relaciones y valores, como sucede con todos los aspectos de la Cábala Pitagórica que Kircher desarrolla de modo sintético y que admite varias lecturas de comprensión. Por ejemplo diremos que con la adición de los números que conforman los cuadrados mágicos que, como es conocido, deben sumarse de modo vertical, horizontal y diagonal, se obtienen los siguientes resultados: sello de Saturno: 9 casillas = 15; sello de Júpiter: 16 casillas = 34; sello de Marte: 25 casillas = 65; sello del Sol: 36 casillas = 111; sello de Venus: 49 casillas = 175; sello de Mercurio que surge de 8 por sí mismo, o sea, 64 casillas = 260; y,

El sello del cuadrado lunar resulta de multiplicar el nueve por sí mismo, 81, cuyos números, colocados en su cuadrado y dispuestos correctamente según las series de números, de forma transversal, recta y oblicua, o en un determinado orden, dan la suma de 369 y la suma de todos ellos es 3321.342

Pero estos cuadrados mágicos son los esenciales porque es lógico que puedan progredir indefinidamente teniendo dentro otros cuadrados a los que llaman hijos, y puede haber varios en un cuadrado cifrado con un número alto de hijos que, eventualmente podrían reproducirse a su vez hasta varias generaciones donde se reproduciría el encuadre que nos signa, de modo sintético, un clon nuestro resumido que a veces es visto como la cárcel de la mente.

Imaginemos que esta explosión numérica sea la de la multiplicidad de los seres y las cosas y por lo tanto de los números que los signan y que además estén cargados de diversos significados en la Cábala Pitagórica que, por otra parte, se corresponde de modo exacto con los cuadrados judíos, donde las letras eran designadas con los signos hebreos, ya que no había llegado la numeración arábiga de procedencia hindú. En todo caso hablamos de veintidós letras que al mezclarse con los números antes vistos obviamente potenciarán las combinaciones posibles.

Y lo más importante es que todas estas letras pueden constituir palabras. Y con ello, sintetizar la totalidad provocando así la generación, siempre junto a quienes elevan un himno de fe, amor, y esperanza por alcanzar la Sabiduría y la Fuerza.

Estamos hablando de un tabernáculo de letras inflamado, el laboratorio del mundo, nuestro athanor, que los números y las letras y por lo tanto las palabras con su poder creador cristalizan.

Respecto a los números nos dice sintéticamente del 1, del 4, del 7 y del 10, 4 = (1+2+3+4=10) = 1+0 = 1; 7 = (1+2+3+4+5+6+7=28) = 2+8 = 10 = 1+0 = 1, formas y nombres que significan la unidad en distintos mundos o planos.

Como se ha dicho repite lo que hemos destacado en nuestros acápites sobre Reuchlin y Agrippa al igual que lo de los cuadrados mágicos que ya hemos mencionado, en tanto que modelos de prácticas teúrgicas y cabalistas.

Dijimos anteriormente que el flujo de la mente divina del Creador tenía lugar a partir de aquella unidad supramundana y arquetípica, primero hacia dentro, por la tríada a la tríada y desde siempre: en ese inefable punto de la eternidad se comunicaba al exterior a través del cuaternario a todo el ámbito de la naturaleza corpórea y a cada uno de los órdenes de la naturaleza creada, mediante las inteligencias que lo presiden todo.

La naturaleza goza con el número septenario. El arquetipo del mundo está compuesto por siete espíritus que están en la presencia de Dios y que eternamente contemplan las ideas divinas, que están presididas por las siete estrellas de los planetas para ordenar el bien en el universo. En el firmamento la Osa también modera las estrellas en beneficio de los navegantes. Las lunas forman igualmente los períodos de cuatro semanas, o veintiocho días, de cuya actuación brotan desde el mundo sideral las siete especies de metales: plata, oro, hierro, estaño, plomo, mercurio y cobre en la naturaleza mineral...

El denario es el número armónico y el más perfecto de todos; asume en sí todas las diferencias de los números pares e impares y todas las proporciones armónicas, como se comprende a partir del cuaternario desintegrado, que tiene la potencia del denario, puesto que 1 2 3 4 sumados forman el denario, porque, así considerado, contiene en sí todas las proporciones de las cinco armonías, en la proporción 2 a 1 se halla la doble, que los músicos llaman diapente; en la proporción 2 a 3 obtenemos el sesquitercio, llamado diatesaron; en la proporción 3 a 1, la triple, que llaman diapasondiapente; en la proporción 4 a 1, la cuádruple, llamada disdiapason. En todo esto está contenida la música universal, no sólo la artificial o del mundo menor, sino también la del mundo mayor, juntamente con la angélica y con la del coro supremo de Dios óptimo y máximo.

Antes que el Creador de todo comunicase la unidad a las cosas inferiores, se difundió como ejemplar a partir de su unidad arquetípica al ternario y cuaternario, incluso al denario, como si fueran diez las ideas y medidas a las que debían ajustarse los números y las cosas, de forma que ya no pudiera darse otro número más allá del denario, salvo que fuera éste multiplicado.343

El estudioso que ha traducido y estudiado esta obra y que ha tenido en cuenta los aspectos esotéricos y los diversos niveles a que se refiere en su exposición, ha comprendido que estos no se anulan entre sí, sino que al enfrentarse se complementan y llegan a superponerse de modo natural.344 Así A. Martínez Tomé en su prólogo nos anota tres importantes consideraciones sobre este tratado de Cábala Pitagórica.

Reconoce, sin la menor duda, que el desarrollo numérico va vinculado de forma muy estrecha a la evolución de los estudios astronómicos y kabalísticos, incluso admite que se extendió su uso gracias al congreso organizado por Alfonso X "El Sabio" para poner un poco de orden en los estudios inconexos que sobre astronomía se hacían por todo el mundo…345

Y en la página 12:

En la tercera parte nos habla de la importancia que daban los árabes a los números, lo mismo que los hebreos, especialmente en la elaboración de sellos y amuletos, portadores de las fuerzas específicas de los dioses que representaban. Aquí nos ofrece la interpretación numérica del nombre de Jesús. El miedo a mezclar lo sagrado con lo profano, tan criticado por él en el libro, va perdiendo el carácter anatematizante.

Acabando en la 13:

A partir de la quinta parte el autor penetra de lleno en el mundo de los misterios esotéricos. Si la Kábala Hebrea ha tenido una importancia decisiva en el desarrollo del pensamiento occidental, como ya se ha indicado, al perderse el conocimiento del idioma hebreo entre los iniciados surge la Kábala Pitagórica, en la que ya se usan las letras del alfabeto latino para los latinos, las del alfabeto griego para los griegos, etc. A veces critica duramente esta utilización kabalística de los números, pero, mediante la utilización de distintos ejemplos para justificar su incoherencia, nos enseña la forma en que se han de utilizar los números....
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Denunciada
FundacionRosacruz | Jan 9, 2018 |

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