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Cargando... Amsterdam (1998 original; edición 2005)por Ian McEwan
Información de la obraAmsterdam por Ian McEwan (1998)
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Because Booker prize deliberations go on behind closed doors, we'll never really know what led the judging panel to Ian McEwan's Amsterdam. Naturally, that makes it all the more tempting and intriguing to speculate. What discussions were there? What compromises were made? Who stuck the knife into poor old Beryl Bainbridge? Were there displays of taste and erudition from Douglas Hurd and Nigella Lawson? How was the case made for Amsterdam? Were there compromises, or just a fuzzy consensus? Did anyone dissent? Did anyone actually try to suggest that this isn't a very good book? On the latter question, we must assume that the answer was "no" – or that the person making the case against the book was roundly ignored. As I shall now attempt to show, a point-by-point debunk of the novel can be carried out in around five minutes – even less time than it takes to read the thing. Amsterdam is an intricate satirical jeu d'esprit and topical to the point of Tom Wolfeishness. It is also funnier than anything McEwan has written before, though just as lethal. ''Amsterdam'' is very British and, despite its title, takes place mainly in London and the Lake District. On the scale of nastiness, it gets high grades as well. But it is less unsettling than McEwan's earlier solemn-gory fables since its humorous dimension is everywhere apparent -- granted that the humor is distinctly black. Its tone overall, as well as part of its theme, reminded me more than once of the excellent 1990 Masterpiece Theater production ''House of Cards,'' in which Ian Richardson plays a sinister Tory cabinet minister. What readers tend to remember from McEwan's fiction is its penchant for contriving scenes of awful catastrophe: human dismemberment in ''The Comfort of Strangers''; a confrontation between a woman and two deadly wild dogs in ''Black Dogs''; the tour de force balloon disaster that brilliantly opens ''Enduring Love.'' Nothing in ''Amsterdam'' quite measures up to these events. Instead, the tribulations of its two main figures -- a composer, Clive Linley, and a newspaper editor, Vernon Halliday -- are treated in a cooler, more ironic manner, even as they move toward disaster. This chilliness is an extension of McEwan's habitual practice of damping down the sensational aspects of his imagined encounters by narrating them in a precise, thoughtful, unsensational way. It may, in fact, make the violence, when it occurs, seem that much more natural and inescapable. Pertenece a las series editorialesContenido enPremiosDistincionesListas de sobresalientes
Molly Lane ha muerto a los cuarenta y seis años de edad. Era una mujer muy libre, muy seductora, y en su entierro se encuentran presentes los cuatro hombres más importantes de su vida: Clive Linley, músico famoso; Vernon Halliday, periodista y director de uno de los grandes periódicos del país; George Lane, su poderoso y multimillonario marido, y Julian Garmony, un notorio político de derechas, actual ministro de Asuntos Exteriores y candidato a primer ministro. Clive y Vernon son amigos desde los lejanos y felices años sesenta, y ambos fueron amantes de Molly cuando todos ellos eran jóvenes, idealistas y pobres. George, el marido, entró mucho más tarde en la vida de la fascinante mujer y jamás pudo poseerla del todo, excepto en el terrible período final, de descenso a los infiernos de la pérdida de memoria y la desintegración mental, en el que se convirtió en su implacable cuidador y carcelero. Y con respecto a Garmony, representante de la derecha más pura y dura y de todo lo que Vernon, Clive y Molly odiaron durante toda su vida, ni el periodista ni el músico pueden explicarse qué era lo que Molly veía en él, qué extraña relación les unía. Pero lo descubrirán pocos días más tarde cuando George, el marido, le ofrece a Vernon unas espectaculares fotos del futuro primer ministro vestido con unas excitantes ropas de mujer. Fotos tomadas precisamente por Molly y que serán el disparo de salida de esta feroz, cínica, mordiente fábula moral. No se han encontrado descripciones de biblioteca. |
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Google Books — Cargando... GénerosSistema Decimal Melvil (DDC)823.914Literature English English fiction Modern Period 1901-1999 1945-1999Clasificación de la Biblioteca del CongresoValoraciónPromedio:
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La historia es un poco enrevesada, sí, pero McEwan se las arregla para que no lo parezca tanto. En definitiva, la mayoría de sus lectores no nos movemos entre ministros, intelectuales de primer nivel o grandes empresarios y no sabemos cómo funcionan sus cosas, así que nos creemos lo que nos dice el escritor de éxito. Sin embargo en esta obra la exhibición de lujos no es irritante. Sobran, en mi opinión, algunos de los párrafos dedicados a explicarnos la sublimidad de la creación musical o el largo paseo por las montañas (esto último no sobra, pero yo lo reduciría claramente), pero sí me han gustado las reflexiones más rápidas de tipo ético. Y hay algunas escenas que están muy bien, como la de la comisaría a donde el músico tiene que ir para ayudar a la policía. Y también la advertencia contra la ligereza con que las leyes (al menos en algunos sitios) se toman el tema de la eutanasia, que acaba legalizando el asesinato. ( )